El sistema de tiempo compartido consiste en la prestación del derecho de uso y goce de una propiedad que por lo general ofrece algún tipo de alojamiento vacacional, durante un periodo determinado en el contrato.  Esto significa que se puede comprar un periodo de tiempo, normalmente de una semana o más, en un alojamiento de vacaciones ubicado en un complejo con instalaciones tales como piscina, bar, restaurante y mucho más.

En lugar de comprar una propiedad, el tiempo compartido permite disfrutar de un inmueble durante el periodo del año previamente acordado y que consiste normalmente en semanas concretas estipuladas en el contrato con la empresa. Algunos tiempos compartidos otorgan el derecho sobre diferentes complejos vacacionales, o resorts, pertenecientes a la misma compañía.

Por lo general, quienes hacen pago de tiempo compartido, pueden elegir disfrutar del inmueble durante el periodo definido o transferirlo a terceros a cambio de una compensación económica, o simplemente como una donación.

La industria de tiempo compartido ha sido criticada y a menudo relacionada con el fraude turístico. A diferencia de los tradicionales arriendos de propiedades de veraneo, donde el usuario decide cada año sobre la base de la calidad y precio de los alojamientos, el tiempo compartido requiere que se haga un gran pago inicial.

Otro aspecto de queja tiene que ver con las cuotas anuales de mantenimiento. Algunas críticas hablan de cuotas siempre al alza que hacen que los propietarios no puedan permitirse el mantener sus derechos de tiempo compartido debido a los aumentos.

Por otro lado está el modelo de inversión de la propiedad fraccionada consiste en compartir la propiedad de un inmueble entre varios inversionistas, quienes adquieren acciones de la compañía propietaria del inmueble. Este modelo te permite disfrutar de dicho inmueble y recibir un porcentaje de rentabilidad tras el alquiler de esta propiedad.

La inversión en propiedad fraccional es un modelo de adquisición y uso que está cambiando la forma de hacer negocios y rentabilizar inmuebles. Se caracteriza por la división de riesgos y derechos sobre bienes tangibles altamente valorizados, que de otra manera serían de difícil acceso. 

En la inversión fraccionada una persona compra un porcentaje de una propiedad, al valor de esa fracción y donde el inversionista se convierte en propietario del inmueble que está adquiriendo. Hay un título de dominio de por medio, puedes ocupar la propiedad en conjunto con el resto de los inversionistas, es tuya a perpetuidad y es heredable. En resumen, tienes todos los derechos y beneficios de ser dueño de la totalidad de un inmueble pero al precio de una fracción de él.

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